Francesc Torralba: «Con mi mujer hemos llorado mucho la muerte del hijo, y sabe qué? Nos ha unido más».
«No he sufrido un cambio radical, pero he confirmado lo que ya sabía: que el tiempo es limitado y lo tenemos que dedicar a lo que es valioso, que no podemos posponer las conversaciones difíciles pensando que ya tendremos tiempo, que cada momento es un tesoro y todo se aguanta por un hilo».
Enlace: www.diaridegirona.cat