Un mundo sin pausa
El tiempo marca nuestras vidas, pero ¿cómo lo experimentamos en un mundo acelerado? Este ensayo filosófico no busca definir su naturaleza, sino analizar cómo el sistema tecnocapitalista impone un ritmo vertiginoso que obliga a vivir sin pausa. La exigencia de productividad sin límites lleva al individuo a un estado de agotamiento y desorientación, generando una sensación de desquicio y pérdida de control sobre su propia existencia.



